Estaba yo intentado huir del Gato Félix en rojo y su mellizo en negro, cuando una de las muchas chicas que, como yo, buscaba la salida de ese laberinto golpeó la guarida de la que colgaba aquella plaga de Mafaldas que se abalanzaron sobre mi cortándome la salida. Luego, ante la mirada cómplice de Epi y Blas, me pude abrir camino entre el estrecho paso vigilado por la Gallina Caponata en bragas y todos aquellos Monstruos de las Galletas, la mitad en boxer y la otra mitad en tanga, para al final conseguir topar de bruces con la caja donde, tras media hora esperando mi turno, me permitieron salir –previo pago de un módico precio– con mi presa: La Pantera Rosa, lista para regalar, empaquetada en esa bolsa de papel de Women'Secret ya era mía.
Fuera me esperaba la amenaza de Winnie The Pooh y de Minnie cargados de globos de colores que venderme, pero eso ya es otra historia.
martes, 13 de enero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Si, la verdad es que en rebajas esas tiendas son un laberinto, pero ¡qué gangas!
Publicar un comentario